En las plantaciones de Ciénaga, Magdalena, se han abandonado los mangos ya cosechados. La sobreproducción de esta fruta ha provocado la saturación de los mercados y los precios han colapsado. Por ello, muchos productores de la región han decidido abandonar su cosecha en los campos, incluso habiendo sido ya recolectada, por la imposibilidad de obtener beneficios.
La crisis es doble en Ciénaga; las principales frutas que se cultivan son mango y limón, pero los cultivos de limones han sufrido un grave ataque de la enfermedad bacteriana HLB. Hay aproximadamente 5.000 productores afectados por la crisis de estos cultivos en las regiones agrícolas de Ciénaga y Sevillano.
Ante el problema planteado por la sobreproducción de mango y sus consecuencias sobre la riqueza y el trabajo en la región, se ha planteado desde las instituciones gubernamentales construir en Ciénaga una planta envasadora y procesadora de mangos, con una despulpadora. A pesar de que la idea es buena y serviría para aprovechar la producción y aumentar su valor añadido, aún no se han comenzado las obras.
Desde la cooperativa local Asofrucol, se lamentan de la necesidad actual de reducir la mano de obra necesaria para el cultivo de mango. Durante la cosecha se crean 6 mil empleos diarios durante tres meses, desde finales de marzo.
De esta región provienen los conocidos mangos de azúcar y de hilaza.
