Una moderna planta piloto de alimentos viene marcando un hito en la formación de los estudiantes de la Facultad de Química e Ingeniería Química de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) que ahora pueden procesar frutas, granos y hasta producir alcohol etílico, a partir de tubérculos andinos, con esta infraestructura que ya tiene instalado el 90% de su equipamiento y que ha demandado una inversión inicial de 1.5 millones de soles.

El decano de la facultad, Dr. Neptalí Ale Borja, destacó que el Centro de Producción Tecnológica de Alimentos inició este año la producción de néctares, aunque su alcance abarca también líneas de cacao, granos y alcoholes.
“El objetivo es que los estudiantes participen de todo el proceso productivo, desde la materia prima hasta el envasado. Todo lo que se prepare aquí no solo será de aprendizaje, sino también de consumo, pues los productos se comercializan internamente en la universidad”, destacó.
El néctar más elaborado actualmente es el de durazno, pero también se viene trabajando con maracumango, camu camu, carambola, además de un experimento con yogurt de fresa. El néctar de durazno, ya fue distribuido durante el reciente simulacro de admisión de la Oficina Central de Admisión (OCA), con gran aceptación por parte de docentes y colaboradores.
“Hemos producido 3,700 botellas en la primera experiencia, y para el examen de admisión proyectamos elaborar 8,000 unidades. Nuestros néctares son nutritivos y con un mínimo de aditivos artificiales, cumpliendo estrictamente con los protocolos sanitarios”, afirmó el decano.
En la primera producción participaron 15 estudiantes de manera rotativa, siempre con supervisión docente.
Ellos se familiarizan con equipos como despulpadoras, marmitas industriales, fajas transportadoras y envasadoras. También se trabaja con una línea de granos y semillas —que incluye descascarilladoras, tostadoras y empacadoras— y una mini planta de etanol con capacidad de producir 10 litros de alcohol a partir de 40 litros de tubérculos.
Sandra Curioso, egresada de la carrera de Ingeniería Agroindustrial de la facultad, señaló que esta experiencia es invaluable: “La planta piloto ha mejorado muchísimo y ahora permite aplicar los conocimientos que recibimos en clase. Ahora, las cuatro escuelas tienen la oportunidad de que sus alumnos participen en procesos reales de producción. Aquí se enseña desde protocolos de limpieza y seguridad, hasta el manejo de equipos y control de calidad. Es un gran logro”.
Detalló que, para producir 3,500 botellas de néctar se requieren alrededor de 510 kilos de pulpa, lo que implica no solo capacidad técnica sino también una buena planificación logística. Además, resaltó la colaboración interdisciplinaria: Ingeniería del Agua y Tecnologías de Tratamiento garantiza la calidad del recurso hídrico; Ingeniería Agroindustrial supervisa el procesamiento; Química desarrolla análisis de laboratorio y los ingenieros químicos formulan los productos.

El Centro de Producción Tecnológica de Alimentos no solo busca formar profesionales competentes, sino también abrir camino a la innovación en la industria alimentaria peruana.
Con próximas producciones de yogur de fresa, néctar de camu camu, carambola o maracumango, se espera que la experiencia de los estudiantes se traduzca en aportes concretos al desarrollo tecnológico del país.
El Dr. José Calvay, docente Investigador de la Facultad de Química e Ingeniería Química sostuvo que este espacio promueve la innovación y la creatividad, impulsando proyectos que transformen recursos peruanos en soluciones sostenibles y competitivas que responden a las necesidades de la industria y la sociedad.
“San Marcos es un referente en ciencia, tecnología, innovación y creatividad, vinculando la academia con el desarrollo del país, formando profesionales que, con innovación y creatividad, transforman la ciencia en desarrollo”.