En el contexto de las medidas preventivas ante El Niño, el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) intensifica sus esfuerzos para eliminar la plaga de la mosca de la fruta, beneficiando a más de 70,986 agricultores en varias regiones del país. Mediante la coordinación con el Senasa, estos agricultores implementan prácticas como el recojo y entierro de frutos afectados, así como el rastrillado de suelos. Gracias a estas acciones, 143,637 hectáreas hortofrutícolas están en proceso de erradicación, minimizando los daños en la fruta y permitiendo la comercialización nacional e internacional de productos como mangos, uvas, cítricos, chirimoya, manzanos y guayabos.
El impacto positivo de estas medidas va más allá de las cifras de agroexportaciones, contribuyendo a fortalecer la seguridad alimentaria, impulsar la economía local y promover la sostenibilidad en la agricultura. El Proyecto Mosca IV, iniciado en 2019, ha instalado 21,483 trampas oficiales para evaluar semanalmente el nivel poblacional de la plaga y tomar medidas específicas. Para 2024, se busca consolidar la erradicación con la participación activa de los productores, promoviendo la sostenibilidad del proyecto y transfiriendo la condición fitosanitaria mejorada a autoridades regionales, municipales y otras organizaciones de productores.