El Canal de Panamá, esencial para el comercio global, se enfrenta a desafíos críticos debido a la sequía del 2023. Las lluvias un 30% menores al promedio histórico dejaron el sistema de embalses con la mitad del agua necesaria. Esto, atribuido a cambios climáticos influenciados por El Niño, afecta la conexión Pacífico-Atlántico y plantea preocupaciones sobre el transporte comercial.
La Autoridad del Canal de Panamá ha establecido límites diarios para el tránsito de barcos, reduciendo significativamente el paso. Con un límite actual de 24 barcos diarios, se espera una disminución a 22 y 18 en enero y febrero, respectivamente, lejos de la capacidad máxima de 38 barcos diarios antes de la sequía. Esta limitación afecta directamente las agroexportaciones peruanas, en particular hacia Europa y África, que representaron el 42.13% de las exportaciones marítimas en 2023.
La situación impacta productos clave exportados por Perú, como palta, tara, uva, mango y banano, que representan el 62.20% en esas regiones. La estimación de solo 18 barcos diarios para febrero aumenta las preocupaciones sobre la entrega puntual y la calidad de productos perecederos, generando una crisis en las exportaciones peruanas y subrayando la importancia crítica del Canal de Panamá en el comercio internacional.
