Las protestas iniciadas por mineros artesanales e informales han ocasionado serios inconvenientes en el tránsito vehicular a nivel nacional. Las vías más afectadas incluyen la Panamericana Sur y otros ejes importantes del transporte terrestre, donde se han producido bloqueos que dejaron varados a camiones de carga, buses interprovinciales y tráileres por largas horas.
A causa de estas interrupciones, varios terminales terrestres decidieron suspender temporalmente sus operaciones en rutas clave, como Lima – Arequipa. Esta situación generó la paralización del servicio, dejando a numerosos pasajeros sin poder viajar y obligando a las empresas de transporte a dejar de vender pasajes hasta nuevo aviso.
Las movilizaciones tienen como origen el rechazo de los mineros al cierre progresivo del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), programado para finalizar el 31 de diciembre de 2025. Esta medida del Ejecutivo ha generado malestar en quienes se encuentran dentro del proceso pero no han logrado cumplir con los requisitos legales establecidos.
Además de las complicaciones en la movilidad, los bloqueos han tenido un impacto directo en la economía de los hogares, especialmente en los precios de productos esenciales. El corte en las rutas ha dificultado el abastecimiento, generando alzas en los costos de alimentos de consumo diario.
Un recorrido realizado el jueves 10 de julio de 2025 evidenció estos incrementos. Por ejemplo, el kilo de papa yungay subió de S/1.80 a S/2.20, y el tomate pasó de S/3 a S/4. También se reportaron alzas en productos como el cilantro y el brócoli, cuyos precios alcanzaron entre S/3 y S/4. Asimismo, el choclo llegó a S/2.50 por unidad y la coliflor hasta S/6 el ramo, reflejando claramente el efecto de las protestas sobre la economía familiar.