En medio de la polémica generada por la modificación a la Ley Forestal en Perú, el exministro de Agricultura, Juan Manuel Benites, defiende los cambios que trasladan competencias del Ministerio del Ambiente al Ministerio de Desarrollo y Riego. Estas alteraciones han generado opiniones encontradas, ya que algunos sectores ambientalistas temen la tala indiscriminada de bosques, mientras otros respaldan la medida argumentando que facilitaría la titulación a empresas agrícolas, en concordancia con regulaciones europeas sobre deforestación que entrarán en vigor en 2025. Benites sostiene que estas modificaciones son esenciales para no retroceder en el desarrollo agrícola en la Amazonía, proporcionando oportunidades a los agricultores.
El cambio legal exime a predios privados sin masa boscosa pero dedicados a la actividad agraria de cumplir ciertas disposiciones de la Ley Forestal, generando preocupaciones y apoyos divididos. Aunque las modificaciones permiten la siembra de cultivos alternativos, como café y cacao, en lugar de coca, los críticos temen las consecuencias ambientales. Benites argumenta que la ley establece una línea de corte hasta su aprobación, permitiendo la formalización de productores de cultivos alternativos y evitando la condena a la pobreza extrema de millones de personas en la Amazonía.
En conclusión, la controversia rodea las modificaciones a la Ley Forestal en Perú, destacando el debate entre la necesidad de impulsar la actividad agrícola en la Amazonía y la preocupación por posibles impactos ambientales. Las alteraciones buscan alinear la legislación con estándares europeos y proporcionar oportunidades a los agricultores, pero enfrentan críticas de sectores ambientalistas preocupados por la deforestación.
