Las pulverizadoras de arrastre evolucionan en el mundo a través de innovaciones que lanzan al mercado las marcas líderes.
Las nuevas tecnologías apuntan a optimizar la presión y caudal, especialmente en botalones anchos, requeridos para incrementar la productividad de las máquinas.
También se evitan las sobreaplicaciones que pueden provocar penalizaciones por fitotoxicidad.
Otras novedades se enfocan en el control de cada boquilla y también en la corrección automatizada de la posición del barral.
Asimismo, la conectividad ISOBUS se expande en las pulverizadoras de arrastre a fin de que sus funciones sean controladas desde la pantalla del tractor.
Actualizaciones
Proponemos un resumen de los principales puntos de evolución que hoy muestran los equipos de arrastre en el mundo:
- Uniformidad. Crecen los sistemas que permiten mantener constante la presión y sin cambiar el tamaño de las gotas. Es posible modular el caudal de la aplicación en toda la barra e incluso en curvas, lo que resulta particularmente ventajoso para botalones muy anchos.
- Monitoreo. Se incorporan sensores de control de flujo que detectan boquillas obstruidas o defectuosas que no suministran el flujo correcto. Se montan en la parte central de cada ala del barral para controlar las boquillas que visualmente no se pueden monitorear.
- Curvas. También se incorporan sensores para que, cuando la pulverizadora dobla, se eviten sobredosis en el interior de las curvas o menor aplicación en la zona exterior. Las sobredosis, que resultan excesivas con botalones anchos, son penados en Europa por fitotoxicidad. A su vez, las subaplicaciones, disminuyen la eficacia y contribuyen al desarrollo de resistencia en las malezas.
- Equilibrio. Aparecen sistemas que controlan automáticamente la altura de las alas del barral, corrigen la inclinación y también la geometría variable de forma automatizada y electrohidráulica.
- Funcionalidad. Las configuraciones de doble circuito permiten la incorporación de productos de agua limpia en cualquier momento en el sistema de pulverización.
- Conectividad. La tecnología ISOBUS posibilita que la pulverizadora se comunique con la pantalla instalada en la cabina de tractor y se puedan controlar todas las funciones.
- Estabilidad. Para trabajar en terrenos accidentados o con pendientes, se incorporan suspensiones hidroneumáticas independientes que incrementan la estabilidad de los barrales, lo que se suma a los sistemas de nivelación automática.
